COLUMNISTAS

La pobre Poza Rica

 

Por Ángel Álvaro Peña

El 2 de junio de 2021 los periódicos del norte de Veracruz y del resto del país daban cuenta del cierre de campaña de Fernando Remes Garza para ganar con toda seguridad, la presidencia municipal de Poza Rica. Días de entusiasmo social y grandes expectativas.

La esperanza de miles de pozaricenses estaba puesta en las acciones inmediatas del “amigo del Presidente” del que fuera “beisbolista estrella”, a la mitad del camino la esperanza se volvió frustración, porque nada de lo que prometió en campaña se cumplió y nadie se explica qué pudo ganar con su elección más allá de gritos, misoginia, muestras de neurosis y desplantes de prepotencia.

Ahora lo vemos mendigando que la empresa Tesla se compadezca de él porque no ha hecho nada en su administración y se anime a instalarse en el territorio que gobierna, para poder pasar a la historia.

La instalación de la empresa estadounidense se ha convertido en un botín de guerra, toda vez que pelea su construcción hasta el imberbe gobernador de Nuevo León, a pesar de que el agua escasea en su estado sin lograr garantizar todavía su abasto para el futuro, pero Samuel García está acostumbrado a dar agua primero a las empresas, luego a las residencias con alberca y luego, si queda algo, a la población, de tal suerte que el propio Presidente dijo que si le dieran a esa entidad la instalación, él negaría los permisos correspondientes.

No olvidemos que Fernando Remes Garza nació en Nuevo León, así que son dos ambiciosos neoleoneses en busca de inversión, pero ninguno tiene agua. Ambos oportunistas, uno por joven e inexperto, el otro por mañoso y perezoso.

Remes quiere que se instale en su territorio la empresa de Elon Musk, lo cierto es que, en Poza Rica, donde quisiera tener la empresa el presidente municipal, no se puede precisamente por la falta del vital líquido, dado que su localidad tiene suministros muy viejos, instalados desde los tiempos de Jaime J. Merino, cuyo parque de béisbol llevó su nombre por muchos años.

 

 

“El Pulpo” Remes, aseguró que de llegar a la presidencia daría continuidad al proyecto de esperanza que inició la Cuarta Transformación. En esa ocasión recorría las colonias Cazones y Perlas del Oriente, donde los ciudadanos lo recibieron en un ambiente de fiesta, brindando en todo momento el respaldo al abanderado de Morena, acompañado de Lizeth Guerra, candidata a la sindicatura, y de quien después se distanciara, por choque de intereses, Cecilia Elías Guevara, en ese entonces candidata a la diputación local.

El 24 de mayo, en plena campaña Remes señaló: “Volveremos a tener desarrollo deportivo de calidad y una olimpiada municipal. El deporte será parte fundamental de la transformación de Poza Rica”. Uno de sus ofrecimientos fue arreglar los espacios deportivos para que jóvenes desarrollen el talento y sean unas estrellas del futuro.

También habló del bienestar para las familias, “tengo la experiencia y un gran equipo de trabajo para gestionar el establecimiento de empresas generadoras de empleos, apegados a los principios éticos de mi partido. Juntos le devolveremos la grandeza a Poza Rica”, de ahí que Tesla sería la primera de ellas, del sector privado, en invertir en ese lugar.

Ya en el cargo consideró que sería buena idea promocionar la paz y la tranquilidad de la población, entonces inició la campaña “Canje de Armas 2022”, programa organizado por la Secretaría de Defensa Nacional para la prevención de delitos y accidentes en hogares, tampoco tuvo mucho éxito. De no ser por la contribución de los militares el proyecto hubiera pasado inadvertido.

Los pozaricenses lo repiten una y otra vez: “Remes no hace nada”, “Ya no le creemos”, porque Poza Rica fue ejemplo de la grandeza no sólo de Veracruz sino del país, donde la riqueza petrolera tuvo su auge; sin embargo, la pasividad de Remes Garza y de anteriores presidentes municipales, incluso de su propio partido, condena a este gran lugar a convertirse en un pueblo fantasma. No ha traído inversión, a grado tal que quiere ver si se conduele de él su amigo el Presidente de la República para que no pase sin pena ni gloria su administración. Parece mentira que son precisamente aquellos que se dicen amigos del Presidente, quienes peor le han quedado. Hay ejemplos de otros que el mandatario califica de extraordinarios funcionarios y no han hecho nada.

 

 

Si la empresa Tesla pudiera ubicarse en Veracruz, estaría dándole vida a dos amigos suyos, de quienes dice son honestos y trabajadores. Así sacaría de la oscuridad a un gobernador y un presidente municipal que en nada han correspondido su confianza.

Hasta el momento, el único que ha correspondido a la amistad, que siempre hace pública López Obrador, es el secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, quien sigue trabajando al ritmo del Jefe del Ejecutivo, de buen humor y con la camiseta de la Cuarta Transformación bien puesta.

En estos momentos existe una constante emigración en Poza Rica en busca de mejores horizontes, los que no se van a Reynosa, emigran a la Ciudad de México, o al puerto de Veracruz, porque en la localidad no hay futuro. Sobre todo, los jóvenes han mostrado un desencanto en su propia tierra, contradiciendo las palabras del Presidente de la República, quien da prioridad a los jóvenes que requieren de espacios para estudiar, trabajar, divertirse, practicar algún deporte, como lo prometió Remes en campaña, pero nada de esto encuentran y prefieren buscar su futuro en otro estado.

La seguridad en Poza Rica, que es una de las prioridades de los habitantes, ha vuelto a ser un problema central, luego de que ha habido balaceras entre taxistas y las noches empiezan a ser un peligro para sus habitantes, principalmente para las mujeres.

Ahora, el presidente municipal de Poza Rica, convoca a la empresa Tesla a instalarse en su territorio. Muestra una entidad inexistente donde al parecer ni siquiera sabe lo que tiene y de lo que carece, donde muestra que desconoce el lugar que gobierna, para desgracia de sus habitantes. Abandonó las reglas básicas de la Cuarta transformación porque miente, roba y traiciona.

Fernando Remes tenía la gloria ganada como deportista, estuvo en el Salón de la Fama, era parte de la historia, pero la ambición y la cercanía con el Presidente lo llevó a incursionar en la política, con las malas consecuencias que todos conocemos convirtiéndolo en un ídolo de barro.

 

PEGA Y CORRE

También del otro lado de la frontera norte hay afectados por el fallo de culpabilidad contra Genaro García Luna, y la primera de ellas es Hillary Clinton, quien siempre se mostró afable y complaciente con el súper policía del sexenio e Calderón. 

 

Esta columna se publica los lunes, miércoles y viernes

 


 

 

 

 

 

 

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