INTERNACIONAL

Senado de Colombia avala reforma laboral entre tensiones con Gustavo Petro

El Senado de Colombia aprobó este martes una reforma laboral para mejorar las condiciones de los trabajadores en medio de tensiones políticas con el presidente Gustavo Petro, quien previamente convocó por decreto a una consulta popular para buscar en las urnas el apoyo de los ciudadanos a su iniciativa.

El Senado aprobó el proyecto de ley con 57 votos a favor y 31 en contra.

La iniciativa aprobada aumentará de un 75 por ciento al 100 por ciento el recargo por trabajo dominical o en festivos, garantizará seguridad social a los trabajadores de plataformas de reparto e incrementará los recargos para los empleados a partir de las 7 de la noche.

La reforma laboral deberá pasar ahora por un proceso de conciliación, debido a diferencias entre el texto del Senado y la versión aprobada por la Cámara de Representantes el año pasado.

«El Gobierno se va satisfecho, hemos logrado voto a voto, artículo por artículo una nueva legislación laboral democrática, progresista y al alcance de los trabajadores y trabajadoras de Colombia», declaró a periodistas el ministro de Trabajo, Antonio Sanguino.

Una comisión del Senado rechazó en marzo la reforma laboral impulsada por el Gobierno, en una derrota para Petro en el legislativo.

Tras esa decisión, el mandatario radicó en el Senado una consulta popular para que los ciudadanos aprobaran directamente en las urnas la reforma laboral, pero la plenaria de esa corporación también la negó, en lo que Petro calificó como una votación «fraudulenta».

Posteriormente, el Gobierno volvió a radicar en mayo ante el Congreso una nueva consulta popular en la que además de 12 preguntas del sector laboral incluyó cuatro relacionadas con el sistema de salud, que hacen parte de un proyecto de ley pendiente de votar.

Petro no se detuvo y la semana pasada convocó por decreto a otra consulta popular con las mismas 12 preguntas que incluía la negada previamente por el Senado para reformar el sistema laboral, en lo que analistas y la oposición política calificaron como un golpe de Estado y un abierto desafío a la institucionalidad, a la separación de poderes y al Congreso.

Pero el mandatario aseguró que si el Congreso aprobaba la reforma laboral, como sucedió, retiraría la convocatoria de la consulta por decreto de la semana pasada, así como la radicada previamente en el Senado.

Analistas y empresarios estiman que las nuevas medidas elevarán los costos laborales entre un 6.8 por ciento y un 35 por ciento.

Comparte en redes sociales