“Regar el tepache” modus opernadi de la FGE
Por Luis Ramírez Baqueiro
“Todos los hombres pueden caer en un error; pero sólo los necios perseveran en él”
– Cicerón –
Una de las misiones de la profesionalización en las dependencias de Gobierno, tiene por objetivo estandarizar procedimientos y hacer más operativo y funcional el proceso a cargo de la misma.
Por desgracia esa tendencia que se pusiera de moda a mediados de los 90’s del siglo pasado y principios del siglo XXI, funcionó mientras quienes encabezaron el Gobierno fueron miembros de esa clase política que venía de abajo y busca profesionalizarse para así mejorar la atención que se le brindaba a la ciudadanía.
De eso, la actual administración morenista de Cuitláhuac García Jiménez no conoce nada de esta corriente de la administración pública, tan es así, que como responsable de la Contraloría General del Estado (CGE), está Mercedes Santoyo Domínguez, una profesional, pero de la industria alimenticia.
Y es que su currícula afirma que es egresada de la carrera de Ingeniería Bioquímica Administradora en Procesado de Alimentos por el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey Campus Querétaro, con Maestría en Control de Calidad y Administración de la Producción en Japón, nada que ver, con temas relacionados a la generación de indicadores para la construcción de políticas públicas más y mejor transparentes.
Pero volviendo al tema que nos ocupa, resulta ser que precisamente por ese pequeño detalle que la Fiscalía General del Estado (FGE) tiene como política interior emplear lo que aseguran se conoce ya como “regar el tepache” una estrategia que evidencia de cuerpo entero, la incapacidad y la pésima calidad de los supuestos funcionarios que la encabezan.
A pesar de que la implementación del nuevos Sistema de Justicia Penal Adversarial provocó el cambio del antiguo régimen en donde se tenía Procuradurías y los responsables de atender las indagatorias e investigaciones era oficio del Agente del Ministerio Público, ahora Fiscales, quienes supuestamente fueron capacitados y por lo que se erogaron miles de millones de pesos, pareciera que no sirvió de nada.
Y esto lo traemos a colación, porque desde la llegada de Verónica Hernández Giandáns las pifias, errores y hierros son el modus operandi de la dependencia.
La más reciente se dio cuando ufanos informaron al mismo Gobernador Cuitláhuac García Jiménez que había sido detenido el presunto asesino de las periodistas Yessenia Mollinedo Falconi, directora del portal El Veraz y la reportera Sheila Johana García Olivera.
Así un joven motorepartidor de nombre Antonio de Jesús era presentado como el presunto responsable material del acto, a lo que se originó una serie de protestas de motorepartidores en la capital del estado, que advertían del gravísimo error, justificado en una homonimia.
El desenlace de esa historia es de todos conocido, debieron reconocer el error, y para colmo, a base de sepa qué artilugio impidieron al joven y su familia externar su punto de vista del sucedido y si se presentaría una demanda por presunto daño moral y demás agraviantes.
Pero ahora durante la madrugada de este martes 07 de junio, se informó por parte de la misma FGE, la detención del presunto autor material de ese mismo acto, para lo cual se imputó a un personaje de nombre Armando “N”, alias “El Trascabo”, la autoría de los hechos ocurridos el pasado 9 de mayo en Cosoleacaque. https://ventanaver.mx/principal/detenido-por-el-presunto-delito-de-homicidio-doloso-calificado-en-agravio-de-periodistas-de-cosoleacaque/
Pues les cuento amables lectores, que resulta sumamente extraño que dicha persona sea la responsable de haber cometido dicha acción, cuando resulta que este sujeto al que le imputan el proceso penal 356/2022, ya debía estar purgando otra sanción y debería estar tras las rejas al momento de dicho hecho.
Y es que resulta que el pasado 27 de marzo de 2022, la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) de Veracruz informaba la detención del mismo sujeto, junto a una mujer al ser interceptados en un presunto retén carretero. https://ventanaver.mx/principal/capturan-a-armando-n-alias-el-trascabo-presunto-integrante-del-cjng/
Según se informaba por medio de comunicado que se mismo día, trascendía la captura de Armando “N”, alias “El Trascabo”, presunto integrante de una célula del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), así como de Luisa Fernanda “N”, luego de que intentaron evadir al personal policiaco, en evento suscitado en la carretera Transístmica 185, tramo Jáltipan-Cosoleacaque.
La detención por parte de elementos de la Policía Estatal ocurrió cuando los oficiales detectaron que un vehículo Nissan March, placas YFW821A, era conducido a exceso de velocidad; luego de marcarles el alto, el conductor descendió de la unidad y disparó contra los oficiales, sin lesionar a nadie.
Junto con Armando “N”, también fue intervenida Luisa Fernanda “N”, por el presunto delito de portación ilegal de armas de fuego y delitos contra la salud; en la inspección al vehículo, los oficiales encontraron 65 dosis de la droga cristal, así como una tabla de madera rotulada con las siglas alusivas al grupo delictivo CJNG.
También fueron asegurados un fusil, un cargador, 17 cartuchos y una pistola calibre .38 especial.
Cabe destacar que, de acuerdo con reportes de inteligencia, a Armando “N”, alias “El Trascabo” se le identifica como integrante del Cártel Jalisco Nueva Generación, responsable de delitos como narcomenudeo, extorsión, cobro de piso, asalto y robo de vehículos en los municipios de Cosoleacaque y Minatitlán.
En febrero de 2021, Armando “N” había sido detenido, junto con otros sujetos, como responsables de una agresión armada contra policías estatales en Minatitlán; mientras que en el 2012 fue intervenido en ese mismo lugar por personal militar cuando realizaba labores de “halconeo” y espionaje contra las fuerzas armadas.
Los detenidos y lo asegurado fueron puestos a disposición de las autoridades ministeriales correspondientes para los trámites de ley.
Hasta ahí, la información que daba cuenta de su detención, por ende, no se concibe y menos se puede explicar que el presunto autor material anduviera libre para la fecha del incidente referido.
Y aquí es donde nuevamente nos cuestionamos, ¿será verdad que “regar el tepache” es el modus operandi de la FGE?, o ¿ya existe una seria colusión entre funcionarios y delincuentes para simplemente prestarles la puerta giratoria ante sus detenciones salir y emplearlos para algo más?
Las dudas y preguntas en contra del funcionamiento y operatividad de la FGE a cargo de Verónica Hernández Giandáns están más que evidenciados, y serían motivo para su separación inmediata del cargo, pero ya sabemos, aquí no pasa nada, y por el contrario, la funcionaria es una maravilla al realizar su trabajo.
Al tiempo.
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