La conquista de las mayorías
Por Herlindo Robles
En 2018, las mayorías conquistaron el poder político por la vía de las urnas, sin embargo, ya se cuentan 4 años en que esa mayoría soporta el embate de los medios de comunicación serviles al poder económico de la derecha, desde la mañana hasta el ultimo minuto de la noche, sicarios del micrófono y de la pantalla, a través de comentaristas, opinólogos, lideres de opinión entre otros profesionales de la comunicación, se ocupan de limitar la libertad de opinión y pensamiento de los afines a la Cuarta Transformación.
Los calificativos a los simpatizantes de la transformación de la vida pública de México, son ya incontables, pues al parecer de los primeros, nadie tiene derecho ni discernimiento cabal para apoyar al gobierno progresista del presidente López Obrador.
Así ante la severa critica de la concentración de un millón doscientas mil personas, que se reunieron para manifestar el apoyo al Presidente de la República, los medios de comunicación calificaron de “acarreados” a los grupos participantes de la marcha. El asunto es que el Estado mexicano otorga concesiones para medios de comunicación que en realidad distorsionan y desinforman a la ciudadanía.
Por ello es necesario mantener la información circular de las conferencias mañaneras de Palacio Nacional, pues de lo contrario, la desinformación se apoderaría del pueblo dando paso a la manipulación pretendida por los medios al servicio del poder económico, a través de la coalición de partidos que persiguen intereses particulares, dejando de lado al de las mayorías, que por la misma razón estas, le otorgan su apoyo al presidente López Obrador, con el resultado de la derrota fáctica de las fuerzas de oposición, entendiendo “oposición”, no como oposición política, que nadie ha demostrado existan, sino simple y llanamente la: rotunda oposición per se, del proyecto de nación del presidente López Obrador, por el simple hecho de que se oponen a perder el privilegio de exfoliar las arcas públicas impunemente.
Los medios de comunicación que atacan al gobierno del presidente López Obrador, sistemáticamente, sin tregua ni rubor, tratando de esconder los avances logrados en 4 años.
Baste haber presenciado la visita del presidente Biden y el primer ministro Trudeau a nuestro país, en la cual, contrario a lo pronosticado por los medios de comunicación, que pregonaban el rotundo fracaso de la política internacional de México, el resultado fue un evento cordial y de acuerdos favorables para las naciones participantes.
Así los partidos políticos y sus esbirros del micrófono, han dado la espalda al pueblo, olvidando que esa mayoría que llevó a la presidencia a la izquierda obradorista, continuará apoyando las políticas públicas que mantienen una estabilidad económica y tipo de cambio que en muchos sexenios no había sido posible lograr con los gobiernos del PRI y PAN, dedicados a la devaluación de la moneda y entrega de los bienes nacionales a empresas extranjeras y nacionales, estas últimas, propiedad de funcionarios públicos corruptos y sus familiares, muchos de ellos con cuentas bancarias en paraísos fiscales.
Así lo más seguro es que la oposición continue perdiendo elecciones por la reiterada traición a las causas del pueblo.
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