¡Mátalo o perdónalo!
Por Herlindo Robles
“Transparencia Internacional” apareció el pasado martes en CNN, pidiendo “condenas”, así literalmente se leía en el cintillo, mientras el vocero del organismo, vía Skype proyectaba sus ideas respecto de la falta de condenas importantes por corrupción en el gobierno del presidente López Obrador.
El canibalismo de aquella organización de filia neoliberal que pide castigo para los voraces políticos ladrones de pasados sexenios. Cuál espectador de circo romano, la “Transparencia Internacional” pide sangre en la arena política, ¿Será acicate para dar la puntilla a los delincuentazos del Cártel Inmobiliario todos cobijados en manto de la pureza en que pretenden convertir su cleptomanía?
Como ellos mismos dirían “a cada capillita le llega su fiestecita” y a los políticos ladrones les llega ya “la lumbre a los aparejos”. Es claro que Genaro García Luna es la insignia de la corrupción, o sea un Negro Durazo exponencialmente superado, orgullo de Calderón que salió por piernas rumbo a España que rara valentía ejerce, el se dice el presidente del empleo, mismo que se lo quitó a miles de trabajadores de Luz y Fuerza del Centro para negociar las líneas de conducción con empresas de fibra óptica.
El gris acomplejado de militar modosito, o sea de cachucha y camisola de campaña, desató tal masacre en México que no se termina después de dos sexenios, o sea doce años de sangre inducida por el programa “Rápido y Furioso” que dicho sea de paso, Barak Obama lo sonsacó, pues el por sus propios medios es claro que no podía ni mover un alfiler, para eso tenía al brillante jefe Genaro García Luna y sus secuaces.
Ahora bien ¿Cuándo se hará justicia a las víctimas de la guardería ABC?, es otra gran oportunidad de llevar espectáculo al circo. O qué tal destapar los fraudes en Pemex que se realizaron durante la gestión de representante legal por Germán Martínez que se hizo millonario en unos pocos meses.
Sin olvidar la Estafa Maestra, de la cual al parecer ya se safó la señora Robles. Así un sin número de robos, asesinatos y fraudes cometidos por “yunquetos” y además sectarios que se esconden tras las sotanas de inocentes clérigos que piensan legislarán a favor de la axiología, pero al menor descuido se convierten en la más fiel reproducción del Izcariote.
Pero aún el clero les sigue creyendo a rufianes que empobrecen al pueblo y se mantienen en el poder político a base de las cuotas plurinominales en un ejercicio de nepotismo, amasiato o componenda, pues como dicen “con dinero baila el perro” y así las candidaturas van y vienen en la danza de los millones.
Bueno no para todos pues los verdaderos fifís, no se manchan las manos de democracia y mandan a sus empleados de confianza para que sean títeres legislativos y poder negociar a la distancia, en este tema nada tiene que ver Claudio Xoconostle, dijera la canción: “son rumores”. Pues así las cosas, ya es tiempo de ejercer el monopolio de ejercicio de la acción penal por parte del Estado y que les den el espectáculo deseado por la “Transparencia Internacionales” y su filial mexicana, a efecto de que alcen el grito y puedan decir: Mátalo o perdónalo, ante el tribunal de los medios de comunicación que desde tiempos lejanos ha perdido credibilidad, pero mantiene su rating a base de sensacionalismo no siempre veraz, pero si atrayente.
Twitter: @zorvha