Maru Campos despilfarra en su imagen
La prioridad soy yo
La gobernadora de Chihuahua atenta contra las libertades, gasta más de 500 millones en su imagen
Por Ángel Álvaro Peña
Bien dicen que los estados en donde gobierna la oposición se vive como en tiempos pasados, donde se pagaba a los medios para que hablen bien de los políticos. El caso de Chihuahua es un ejemplo de cómo lo más importante para la mandataria estatal es su imagen y no el servicio al pueblo.
Desde meses anteriores la gobernadora panista de Chihuahua es noticia por estar contra la distribución de los libros de texto gratuitos que reparte la SEP, ante esta situación se puso de acuerdo con su amigo Diego Sinhué Rodríguez Vallejo, gobernador de Guanajuato, para que ellos elaboraran sus propios libros de texto con el contenido que ellos quieren que lean los maestros y los alumnos.
Esta impresión de libros para primaria tendría un costo de 72 millones de pesos por cada estado, porque su impresión se otorgaría a una empresa privada que sería la ganona, desde luego, y para seguir con el esquema del pasado, esos empresarios tendrían que darles moche a los dos gobernadores panistas. Además, los libros tendrían un costo para los alumnos de “cooperación voluntaria”.
La indignación creció cuando se conocieron las condiciones de las escuelas de la entidad, sin ventanas, con el techo agujerado, con piso de tierra, sin ventilación.
Es una tradición para los panistas rechazar los libros de texto, los consideran comunistas desde que aparecieron en 1957, porque ellos nunca reparan en las necesidades de la población y menos en el gasto que implica para la mayoría de las familias mexicanas comprar libros, cuadernos, zapatos, lápices, uniformes y además pagar el transporte diario a la escuela. Esas necesidades las desconocen los panistas porque están muy lejos de la problemática de la población, pero están muy cerca cuando de enriquecerse a sus costillas se trata.
Posteriormente, la gobernadora dio a conocer que prohibiría el aire acondicionado en las pocas escuelas que lo tienen, a pesar de que en su mayoría fueron los padres de familia quienes colocaron y compraron dichos aparatos y equipos, su argumento radica en que se gasta mucha energía eléctrica en tiempo de calor.
Sin embargo, Maru Campos, en lo que lleva de su gobierno, escasamente dos años, ha gastado la cantidad de 518 millones 638 mil 764 pesos en el manejo mediático de su imagen personal diciendo que es una gran gobernadora, beneficiando a los medios de la entidad y nacionales.
El medio Yo Ciudadano señala una investigación donde, al consultar la página de Contratación Pública del Estado y solicitar información, encontraron que en dos años la Coordinación Social del Gobierno de Chihuahua entregó 312 contratos de publicidad. Además, el 49% del presupuesto de los contratos, 255 millones de pesos, se destinan solamente para pagar a 10 medios de comunicación. Asimismo, subraya que el gasto de publicidad oficial del gobierno estatal es del doble o triple del presupuesto que se le asigna a dependencias y organismos públicos autónomos del estado.
La denuncia pública señala que la Comisión Estatal de Derechos Humanos recibió, entre 2022 y 2023, un monto total de 189 millones 764 mil 264 pesos, lo que representa un 37% del presupuesto destinado a publicidad oficial.
Es decir que, para la panista, ella es primero. Lo demás es secundario.
La prohibición de la distribución de libros de texto provocó que hubiera pleitos y violencia en las calles cuando se encontraban los padres de familia que estaban a favor de que se repartieran y los que afirmaban que contenían información del diablo, porque se basaban en un cuento indígena para decir que en ellos se invitaba a adorar al demonio.
En una ocasión un maestro asistió al patio del Palacio de Gobierno con sus alumnos para exigir los libros de texto, en la capital de Chihuahua, la secretaria de Educación el estado, Sandra Gutiérrez Fierro, por órdenes de la gobernadora, mandó detener al profesor Jesús Adolfo Trujillo Holguín, quien fue investigado para saber si tenía autorización de los padres de los niños de ese grupo para sacarlos de la escuela, violentando los derechos de libertad de reunión y de expresión. El profesor sigue siendo acosado por policías y gente de Maru Campos.
La persecución política es propia de los conservadores panistas, aunque cuando de ellos se trata dicen que son perseguidos políticos, cuando en realidad son delincuentes comunes.
La mayoría de los padres de familia de las escuelas públicas exigen que haya revocación de mandato, porque ya no soportan a la gobernadora que ha declarado disparates, malas palabras y suele mostrar ciertas alteraciones de conducta, producto de alguna droga o alcohol, como lo mostró durante el grito de la noche del 15 de septiembre cuando en los videos se hace evidente este problema.
El egocentrismo de Maru Campos hace pensar que después de la gubernatura quiere competir por un cargo de elección popular más alto, seguramente en una de las fantasías o alucinaciones del delirium tremens, quiere llegar a ser Presidenta de la República.
De hecho, en el PAN se hablaba de sustituir a Xóchitl Gálvez por Maru Campos, pero vieron que el riesgo de perder las elecciones por una muy amplia ventaja seguía latente como hasta ahora.
Conductas como la de la señora Campos no hacen otra cosa que hacer perder votos a la derecha que tienen en la forma de gobernar de esta mujer un ejemplo claro para conocer para quién trabaja la política conservadora.