Hallan sistema de captación de agua con restos óseos en Zona Arqueológica de Tulum
Investigadores del INAH encontraron en la zona arqueológica de Tulum un sistema de captación de agua conocido como chultún que pudo haber tenido un uso ritual
Especialistas del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) descubrieron en la zona Arqueológica de Tulum un sistema de captación de agua conocido en la cultura maya como chultún, el cual podría haber sido construido durante la primera ocupación del sitio, antes del periodo Postclásico Tardío (1200-1500 d.C).
La noticia fue dada a conocer por la Secretaría de Cultura Federal, a través de un comunicado, en el que afirman que el descubrimiento fue realizado durante el desarrollo de labores del Programa de Mejoramiento de Zonas Arqueológicas (Promeza), implementado por la misma dependencia cultural.
Qué es el Chultúl que encontraron en Quintana Roo
Este artefacto fue encontrado al interior del Edificio 25, denominado Casa del Halach Uinic, en la crujía noroeste, cosa que lo vuelve particular, pues es el único encontrado dentro de una edificación.
Enrique Marín Vázquez, encargado de campo del proyecto declaró que dentro de éste se encontraron «rellenos de piedras de tamaño medio, capas gruesas de ceniza pura y, en lo más profundo, restos óseos humanos y piedras quemadas».
Los restos óseos encontrados
Según Marín Vázquez dichos restos humanos se encuentran en proceso de investigación en el Laboratorio de Antropología Física del Centro INAH Quintana Roo, a cargo del doctor Allan Ortega Muñoz.
Los investigadores sostienen la hipótesis de que los restos podrían corresponder a tres infantes, cuyos cuerpos fueron enterrados junto a astas de venado, dientes de tiburón, pendientes de concha y otros elementos que rompen con el uso que originalmente se había dado al compartimiento subterráneo, en etapas anteriores.
«El compartimiento subterráneo data de la primera ocupación de Tulum, lo que se corroborará con el análisis de los sedimentos encontrados, mismos que también pueden revelar el tipo de alimentos que se consumían y cuál era la vegetación de la época, entre otros datos relevantes”, sostiene el arqueólogo y colaborador del proyecto, Felipe Nava Ahuatzin.