Sinaloa registra un nivel de deuda sostenible
Los factores que influyen son las inversiones locales e internacionales y la alta disponibilidad de energía eléctrica en el estado.
S&P Global Ratings confirmó la calificación de “mxA” del estado de Sinaloa; la perspectiva se mantiene Estable.
De acuerdo con un reporte enviado a la Bolsa Mexicana de Valores, la confirmación de la calificación considera las políticas financieras prudentes que faciliten resultados fiscales relativamente balanceados y un nivel de deuda sostenible. Asimismo, incorpora un desempeño presupuestal débil que incorpora la alta dependencia de las transferencias federales y las presiones relacionadas con sus pagos por pensiones.
Por otro lado, su posición de liquidez débil, el uso de financiamiento de corto plazo y perspectivas de crecimiento económico en línea con el soberano, a pesar de la expectativa de nuevas inversiones en el estado, restringen la calificación.
Sinaloa ha logrado atraer inversiones locales e internacionales gracias a las importantes obras de infraestructura que ha realizado durante los últimos años y a la alta disponibilidad de energía eléctrica en el estado. La mayoría de estas inversiones se concentran en los sectores energético, automotor y aeroespacial. Asimismo, la competitividad del estado ha mejorado, como resultado del dinamismo en el mercado laboral e inversiones en gas natural e infraestructura.
“Dicho lo anterior, Sinaloa creció 0.8% en el 2023, por debajo del promedio nacional, dado que el sector primario, que representa 12.8% del Producto Interno Bruto (PIB) estatal, se vio afectado por la disminución en los precios internacionales de granos, especialmente en el maíz. En los próximos dos años esperamos que Sinaloa registre una tasa de crecimiento similar al promedio nacional, como resultado de un mayor número de inversiones y la recuperación del sector primario. Estimamos que el PIB per cápita de Sinaloa se ubicó en 12,657 dólares en el 2023, por debajo del promedio nacional de 13,484 dólares”, estima la calificadora.
Con la intención de asegurar estabilidad financiera de los pequeños productores, el gobierno de Sinaloa y el gobierno federal diseñaron programas de compra por encima de precios de mercado. El costo del programa en el 2023-2024 fue por un total de 4,100 millones de pesos, equivalente a 6.2% del gasto operativo en el 2023, que el estado financió con deuda de corto plazo por un monto aproximado de 5,500 millones de pesos.
Nivel de deuda sostenible
A marzo de 2024, la deuda total del estado se ubicó en torno a 7,025 millones de pesos. La deuda de largo plazo representa 3,330 millones de pesos y se encuentra en un fideicomiso de fuente de pago que cuenta con la afectación de 25.34% del Fondo General de Participaciones (FGP) que le corresponde al estado. La deuda de corto plazo se ubicó en torno a 3,695 millones de pesos, cuyo vencimiento fue en mayo del 2024.
Adicionalmente, en mayo del 2024, el estado contrató 2,925 millones de pesos adicionales en financiamiento de corto plazo, con vigencia en mayo del 2025. Esperamos que este pago presione el servicio de deuda del 2025, pero que regrese la deuda total a 3.2% como porcentaje de los ingresos operativos, y que el pago por intereses se ubique en torno a 0.4%, ambos hacia el 2026.
Balances Proyectados
La firma estima que el estado mantenga superávits operativos en torno al 4.6% de sus ingresos operativos durante el 2024-2026, menores al promedio de los últimos tres años, así como pequeños superávits después de gastos de inversión.
Se espera que Sinaloa mantenga los esfuerzos de fiscalización tributaria y digitalización, a través del Servicio de Administración Tributaria del Estado de Sinaloa (SATES). Sin embargo, el estado podría afrontar presiones presupuestales de nómina, subsidios y de gasto en seguridad pública. Dada una menor capacidad para generar ahorros de recursos propios y sin planes de financiamiento de largo plazo, el gasto de capital se mantendría relativamente bajo, alrededor de 4.0% del gasto total durante el 2024-2026, por debajo del promedio de 5.3% observado entre el 2019 y el 2023.
“Estimamos que el efectivo de libre disposición del estado, más el flujo de efectivo de las actividades operativas y el acceso a líneas de crédito revolventes de corto plazo se ubique en torno al 60% de su servicio de deuda proyectado para los siguientes 12 meses. El estado ha utilizado regularmente líneas de crédito. Consideramos que el acceso del estado a la liquidez externa, particularmente a créditos bancarios, seguirá siendo satisfactorio”, agrega la firma.