Controlada deuda en Veracruz
Por Ángel Álvaro Peña
Las acusaciones sobre deudas sin pagar y nuevos créditos de algunos se reducen a señalamiento en cuanto a cálculos parciales. Las deudas contraídas durante el sexenio de Cuitláhuac García Jiménez, se pagaron en su mayoría. De tal suerte que de aquí a que tome posesión el gobierno de Rocío Nahle habrá finanzas sanas.
El anuncio ya lo hizo la subsecretaría de Egresos, de la Secretaría de Finanzas y Planeación, Xochitlquetzalli Álvarez, quien señaló que habrá finanzas sanas el próximo periodo de gobierno.
La discusión de las deudas contraídas en el gobierno del actual mandatario estatal, se convirtieron en un escándalo debido a que se solicitaron tales cantidades que llegó el momento en que le señaló como el estado que había solicitado más créditos en todo el país, lo cual no es ningún problema cuando están garantizados los pagos correspondientes, pero era necesario exaltar esta situación para tener que escandalizar y dar una mala imagen.
Más de un medio se dedicó a anunciar que desde que llegó García Jiménez había contraído deuda hasta 2024. Con la mala fama que tienen los préstamos por las consecuencias que históricamente han causado en la economía nacional, pero si el gobernador saldrá en 2024 y entregará el poder en diciembre de 2024, no habrá deuda heredada sino deuda saldada.
Así, la ruina del pasado que sí heredó su antecesor fue de casi 100 mil millones de pesos, más de la mitad correspondía a proveedores y contratistas.
En diciembre de 2010, al llegar Duarte de Ochoa a la gubernatura heredó una deuda bancaria de 10 mil millones de pesos y, en lugar de recortar el gasto corriente y aplicar disciplina financiera, solicitó al Banco del Bajío un crédito de mil 500 millones de pesos.
En 2011 y 2012 Javier Duarte solicitó 18 préstamos, por los cuales debió contratar cuatro créditos más para garantía de pago. Uno de los más cuantiosos se contrató el 6 de septiembre de 2012, cuando pidió 5 mil 500 millones de pesos a Inbursa, con cargo a participaciones federales.
Cuitláhuac solicitó 13 préstamos pedidos de diciembre del 2019 a enero del 2020, y suman un total de 37,022 millones de pesos, con un plazo a pagar en 7,305 días, es decir, vencen en febrero y abril del 2040.
El escándalo eran las altas cifras pero no la manera de pagar, debemos recordar que el préstamo lo autoriza el Congreso local y aunque esté en el mismo partido que el gobernador, debe presentar justificaciones de su aprobación, donde cada día hay más candados, que exigen demostrar que se necesitan y orientar el destino de cada peso. Pero cuándo objetivo es golpear y no informar, eso es lo de menos.
La ratificación del secretario de Finanzas del gobierno estatal de Veracruz, José Luis Lima Franco habla de “La disciplina financiera y el control del gasto son elementales para una buena administración. El Lic. José Luis Lima continuará como titular en la Secretaría de Finanzas y el Lic. Pedro Miguel Rosaldo nos apoyará en la subsecretaría de egresos”, en palabras de Nahle, quien reconoció que a Lima Franco como el instrumento de la disminución de la deuda pública y la estabilidad de las finanzas en Veracruz.
En un momento Veracruz fue el estado que más deuda solicitó, lo cual magnificaron muchos, ahora que es el estado que pagó los créditos obtenidos sólo algunos pocos lo difunden, en un desequilibrio informativo que hace de los medios una noticia.
PEGA Y CORRE.- Es inexplicable la protesta del embajador de Estados Unidos en México por la reforma al poder Judicial, con el pretexto de que ese país tiene empresas en nuestro territorio. Lo cual es una realidad lo que no se explica qué tenga que ver una cosa con la otra, ya que cualquier litigio a nivel comercial, no se dimite en el poder Judicial sino en las instancias jurídicas de la Secretaría de Comercio, o Relaciones Exteriores, donde nada tienen que ver los jueces ni los magistrados ahora en paro indefinido… Esta columna se publica los lunes, miércoles y viernes.
