Nula oposición en Veracruz
Por: Luis Ramírez Baqueiro
“La razón se equivoca a menudo, pero la conciencia no.” – Josh Billings.
Se instaló la Sexagésima Séptima Legislatura Local, como era de esperarse asistieron todos los legisladores a tomar protesta.
Partiendo plaza aparecieron uno a uno, acompañados por sus respectivas familias y un séquito de soplanucas que en verdad no le abonan nada a la democracia y la política de altura en Veracruz.
Así fue como llegaron los Morenos puntuales a la cita. El primero en aparecer al filo de las 9 de la mañana fue el presidente de la Junta de Coordinación Política, Esteban Bautista Hernández quien junto a su novel equipo de trabajo afinaban detalles para la ceremonia oficial.
Al filo de las 9:30 horas la romería ya estaba a lo queda, más de 500 reporteros, fotógrafos y medios de comunicación esperaban ansiosos el arribo de los legisladores para arrebatarles sus primeras impresiones.
Fue evidente ver a una oposición totalmente desarticulada, misma que en voz del dirigente del PRI, Adolfo «Fofo» Ramírez Arana no tendrá absolutamente nada que hacer ante la apabullante mayoría que representa Morena y sus aliados.
Por ahí apareció Héctor Yunes Landa viejo lobo de mar en las aguas turbias de la legislación veracruzana, para anunciar que será el coordinador de dos legisladores de su partido, eso y nada resulta casi lo mismo.
Otro que llegó haciendo lo mismo fue su sobrino el ex alcalde y ex senador Fernando Yunes Márquez quien arriba al Congreso de la mano de un grupo de asesores de esos que flotan para no pisar el suelo donde camina la gente regular, no se le vaya a pegar la chusma, diría Kiko el personaje de Roberto Gómez Bolaños, interpretado por Carlos Villagrán.
La otra que también se placeo fue Indira Rosales San Román ataviada de un conjunto en tonalidad azul, declarando a diestra y siniestra sobre el papel que jugará y lo mucho que defenderá a los veracruzanos. Ajá.
Apareció también la bancada Naranja con todo el séquito encabezado por el mismo Dante Delgado Morales, el cachorro y beneficiario del proyecto naranja, buscando reflectores, sin mayor pena ni gloria.
Es evidente que ante la designación de la nueva Mesa Directiva que presidirá Tanya Carola Viveros; Tania María Cruz Mejía, del PVEM, como vicepresidenta (al servicio total de Morena); y Felipe Pineda Barradas, para variar, también de Morena no les dejaron ni migajas a la efímera oposición.
Esa que no ha terminado de comprender que el pueblo se cansó de sus promesas y de su demagogia pura, o comienzan a tener verdadero contacto con la gente o váyanse despidiendo de su posible continuidad en el futuro próximo.
El cerco de seguridad implementado fue tal que no llegó nadie hasta la puerta del Congreso a manifestarse, pues los dejaron cuadras atrás en su intento por expresar su apoyo a los legisladores.
Pero que no se le olvide a esa desdibujada oposición que si desean permanecer el proyecto se llama Veracruz, urge replantear su papel y la forma en que deberán presentar su propuesta, porque como llegan, seguramente en la próxima elección se irán.
Al tiempo.