Adiós al Fobaproa
Por Ángel Álvaro Peña
Lo que empezó como un reto a Morena como para ver la capacidad intelectual y fuerza social, termina por ser objeto de estudio del partido en el poder.
El Fobaproa fue una decisión de la cúpula del poder en beneficio de la cúpula económica, incluso quienes no tenían deuda con los bancos aprovecharon para tener ingresos extras, entre quienes se encuentran los hermanos del ex presidente Vicente Fox.
En marzo de 1998, Ernesto Zedillo, a quien recibió la economía del país con el error de diciembre a unos cuantos días de haber tomado posesión, mandó al Congreso una iniciativa para crear un marco legal que redujera las posibilidades de una nueva crisis bancaria, así como para crear mecanismos más eficientes de supervisión a las actividades crediticias y facilitar la capitalización de los bancos.
Aunque fue creado en 1990, no se activó hasta 1995. La crisis económica prevista para su creación sí llegó, en 1994, mismo año en que Salinas terminó su gestión, así que fue su sucesor, el encargado de ponerlo en marcha.
Es decir, se pagaba deuda privada con dineros públicos.
En los siguientes años, el Fobaproa absorbió la deuda de los bancos, que para 1999, año en que se publicó la Ley de Protección al Ahorro Bancario, llegó a los 552,300 millones de pesos, es decir, el 11% de la economía del país.
Hasta diciembre de 2021, la deuda del Fobaproa alcanzó 1 billón 040,507 millones de pesos, suma que sigue cubriéndose por los contribuyentes. Uno de cada 10 pesos de la deuda interna de México es lastre del rescate bancario avalado por el PRI y el PAN, que derivó en la creación del Fobaproa y que se socializó en 1998. Una deuda que tardaría en pagarse 72 años, toda una vida, según cálculos se terminaría de pagar en 2050.
Ante esta realidad, los diputados de Morena analizan dejar de pagar el Fobaproa para obtener más recursos para el Presupuesto de Egresos de la Federación de 2025, comentó el presidente de la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados, Ricardo Monreal, quien señaló que lo están revisando, pues tienen que ver la forma en que el Estado Mexicano caiga en incumplimiento con los acreedores.
“Se tiene que revisar. No se puede simplemente tomar una decisión sin analizar las consecuencias que se puedan tener, porque son compromisos contraídos con el exterior y es, en efecto, una deuda. Desde el momento en que se trasladó de haber sido deuda privada de bancos a deuda pública de los mexicanos, estamos pagando las consecuencias (…) Se está analizando, sin que se caiga en incumplimiento en la ruptura con los acreedores”, dijo Monreal.
La repercusión de la suspensión de pagos del Fobaproa, significaría una demostración de fuerza de la Presidenta Claudia Sheinbaum, ya que era inimaginable esta medida. Sería un gran logro político-social y una presión económica más, encabezada por empresarios.
Así, los contribuyentes menores de 30 años tienen enfrente toda su vida laboral para pagar el saldo del rescate bancario, etiquetado como deuda pública el 12 de diciembre de 1998, cuando muchos de ellos o no habían nacido o tenía menos de siete años.
A julio de 2021, el saldo de los pasivos del IPAB, antes el Fobaproa, sumaron 975 mil 892 millones de pesos, se añaden 45 mil 579 millones de pesos por el programa de apoyo a deudores. Estas obligaciones son parte de la medida más amplia de la deuda pública, el saldo histórico de los requerimientos financieros del sector público.
Sin embargo, ahora los panistas y priistas se quejan por deudas de Pemex y CFE que son muy bajas en comparación a la que aprobaron, pero se confían en que el pueblo de México olvida con facilidad.
El debate interno en Morena sobre la posibilidad de desaparecer un capricho acordado entre cúpulas de poderosos, tendrá que ser no sólo parcial sino paulatino, pero será también un respiro a la economía nacional el hecho de que pueda sacudirse esa herencia por la que nadie votó, ya que nunca se preguntó a los mexicanos si querían liberar de sus deudas a los empresarios y banqueros.
Si Morena no aprovecha esta oportunidad posiblemente no haya otra, la mayoría aplastante con la que cuenta en ambas cámaras es un respaldo sólido para esta intervención, que seguramente será apoyada por el PRI, que hace un par de meses en boca de Rubén Moreira, se lo coloco al partido en el poder como un reto imposible de vencer.
Aquí, lo político y lo económico deben ser fusionados de acuerdo con los intereses del pueblo, lo cual es una consigna que debe ser realidad. Seguramente como sucedió en tiempos de Lázaro Cárdenas, podría convocarse a cooperar para liquidar de una buena vez este lastre político, cuando se hacían largas filas para que hombres, mujeres y niños dejaran los contenidos de sus alcancías y cooperaciones mínimas para liquidar la expropiación petrolera en un acto de amor a la patria. Las fotografías muestran como la gente en 1938, contribuía hasta con gallinas, joyas, propiedades, para liquidar a las compañías extranjeras que querían, desde ese entonces, adueñarse de nuestro petróleo. A pesar del Fobaproa y malos gobernantes México sigue vivo.
PEGA Y CORRE.-En declaraciones sorpresivas Concamín y el PAN apoyan la postura de la Presidenta Claudia Sheinbaum, respecto a las amenazas del presidente electo del vecino país, Donald Trump, de elevar los aranceles. La unidad crea no sólo fortaleza en la Nación sino un mejor futuro… Esta columna se publica los lunes, miércoles y viernes.
