La derecha va por la educación
Por José Páramo Castro
Ante la imposibilidad de tener los cauces tradicionales de presión los colegios particulares acudieron a la SEP, tocaron puertas para entregar sólo 27 mil firmas y solicitar audiencia, lo cual les fue negado, y ante la negativa, pegaron papeles al estilo de las femiminazis y trataron de convocar a la prensa sin lograrlo.
La derecha fáctica está preocupada por la pasividad del PAN, que era el medio a través del cual daban a conocer sus proyectos y ejercían el poder sobre el SEP en los tiempos en que había partidos de derecha y no fusiones que confunden las definiciones.
La derecha en México no puede ubicarse únicamente en el PAN, en el PRI, en MC o en el PRD sino en los poderes que en su momento movieron sus programas de acción y ahora se ven desamparados a no contar con un partido que los represente en la vida política de México.
Cuando el PAN requería de los servicios de ese partido, sus militantes caminaban por la calles y visitaban casa por casa, convencido a la población para que no aceptar los libros de texto gratuitos porque contenían propaganda comunista.
Eran los años del temor al socialismo toda vez que el general Lázaro Cárdenas dio el banderazo de salida a la educación socialista, y como acto concreto inauguró el Instituto Politécnico Nacional.
“DIZQUE ASOCIACIONES”
Ahora cinco asociaciones fantasma, intentan hacer presión sobre la SEP para que se les permita decidir el contenido de los libros de texto que se reparten en primaria, como una manera de influir en la educación del país, porque están relegados de muchas actividades que ellos mismos desdeñaban, pero que ahora, al verse agonizantes, quieren retomar para mostrar que existen.
Para estos grupos es un logro haber reunido escasas 27 mil firmas sumando, los esfuerzos de cinco instituciones, lo cual es un número bastante bajo si se quiere pensar en su capacidad de convocatoria y si se quiere calcular su fuerza social pues salen perdiendo estos grupos conservadores que quieren transformar según su muy arcaico punto de vista la educación.
Es decir, que cada una de las asociaciones sólo pudo reunir 5,400 firmas, lo cual puede hacer cualquier persona en una semana o menos, pero según ellos, la fuerza les acompaña.
Afirman desde su muy particular punto de vista que el país está en una emergencia educativa grave. Ante este cúmulo de firmas, consideran que tienen el apoyo suficiente como para hacerse escuchar.
LOS CONSERVADORES
Luis Arturo Solís Bravo, presidente de la tradicionalmente conservadora Unión Nacional de Padres de Familia, explicó que la sociedad necesita conocer cuál es el diagnóstico del rezago educativo y pérdida de los aprendizajes en los estudiantes.
Pero no pudieron ocultar sus verdaderas intenciones por mucho tiempo y expresaron su desacuerdo con el nuevo modelo educativo que “pretenden imponer la titular de la SEP, Delfina Gómez Álvarez, y el Director de Materiales Educativos, Marx Arriaga.
Mauro Zayago García, de la Alianza de Maestros, AC, señaló que el proyecto educativo de la SEP “no pretende educar, sino apoyar una plataforma política de gobierno.
Daniel González, de la Alianza Nacional de Padres de Familia, acusó que están teniendo un vacío informativo, experimentando una imposición y cerrazón de las autoridades educativas.
“Queremos saber qué se les enseñará a nuestros hijos, antes de que estén impresos los libros de texto, que nos den el espacio y nos escuchen” solicitó como una manera nostálgica de rescatar los espacios que anteriormente tenían en el viejo régimen, donde por el simple hecho de ser propietarios de escuelas particulares se convertían en expertos en pedagogía.
Solís Bravo acusó que ninguna autoridad de la SEP ha tenido a bien recibirlos, escucharlos, o atender su reclamo de información sobre
“Lo único que sabemos son las afirmaciones de Marx Arriaga como justificante para hacer cambios, pues carecen de bases científicas o pedagógicas para calificar al sistema educativo como un “modelo neoliberal, meritocrático, conductista, punitivo, patriarcal, racista, competencial, eurocéntrico, colonial, inhumano y clasista”.
Según estas asociaciones a los Padres de Familia les inquieta otro tema igual de sensible que el educativo: la educación sobre sexualidad que se imparte en las escuelas.
Debe llamar la atención la presencia del líder de Iniciativa Ciudadana, una agrupación de ultraderecha, encabezada por Aarón Lara, quien se presentó a pegar carteles en las puertas de la SEP y es conocido como un golpista, asociado a grupos de evangelistas conservadores y de línea dura. Asociado con organismos como Conferencia Política de Acción Conservadora, que promueve el fanático de Eduardo Verástegui.
Aarón Lara se asocia con agrupaciones de evangelistas radicales como Vida A. C. que pretende convertirse en un partido político anti AMLO, y que tiene entre su cúpula al tristemente conocido ex senador panista, René Bolio, quien le dijera negro a un empleado en la embajada cubana, como un insulto.
La ultraderecha quiere ahora apoderarse de la educación en México como una manera de seguir trabajando en la recuperación de sus privilegios y seguir tomando la educación como una mercancía y no como un derecho.
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