Panistas le temen a la cárcel
Por José Páramo Castro
Cada día el PAN se esfuerza en mostrar a la población de su inclinación por el delito. Hace unos días los panistas de la CdMx exigió a la Fiscalía General de Justicia informar sobre si los legisladores federales y locales, así como alcaldes de su partido, tienen alguna investigación abierta en su contra y, en su caso, que se les otorgue el acceso a la carpeta correspondiente, mostrando una angustia inocultable.
Quieren saber si están incluidos en las denuncias para ampararse y preparar su defensa. Tienen la conciencia tan sucia que ya no pueden más y se mostraron impacientes por saber si les cayeron o pasaron inadvertidos ante la justicia.
En el cártel inmobiliario están implicados muchos panistas, ya sea por acción o por omisión o por complicidad silenciosa o encubrimiento como podría ser el caso de la sobrina de Margarita Zavala, Mariana Gómez del Campo, quien en el momento en que Jorge Romero realizaba el diseño de la gran estaba inmobiliaria, era su pareja sentimental, de ahí que haya dicho que exige le informen los nombres de los implicados en este fraude. Lo que quieren es salir librados de las acusaciones. Saben que son culpables y que faltan muchos por ser nombrados y otros tantos por ser descubiertos.
Esta exigencia tiene como pretexto la fantasiosa persecución política que argumentan los panistas, luego de la orden de aprehensión girada en contra del coordinador de la bancada albiazul en el Congreso de la CdMx, Christian Von Roehrich, señalado por presunta corrupción con relación al llamado “cártel inmobiliario de la Benito Juárez”.
A dicha protesta asistió el coordinador del PAN en San Lázaro, Jorge Romero Herrera; los alcaldes de Benito Juárez y Miguel Hidalgo, Santiago Taboada y Mauricio Tabe; Kenia López Rabadán, así como diputados y concejales locales.
Santiago Taboada, alcalde de Benito Juárez, dijo que los integrantes del PAN no han sido notificados de ningún proceso legal, “porque ni Christian Von Roehrich, (prófugo de la justicia), fue notificado de una carpeta de investigación en su contra, pero qué tal 26 muertos en una línea del Metro y ni un citatorio en más de un año de que ese acontecimiento ocurrió”. El problema del metro fue un accidente, tal vez por negligencia o incapacidad, no se compara con un delito premeditado y con un potencial de número de muertos mucho mayor. Si este cártel inmobiliario no hubiera sido descubierto la muerte esperaba a más de 100 personas que viven en estructuras frágiles y con una bomba de tiempo en sus instalaciones de gas. Porque no les interesa que la gente muera con tal de ganar dinero. Están confundidos y quieren confundir.
Los panistas con proclives a los delitos y una muestra muy reciente de ello es la condición de saqueo en que dejaron las oficinas del gobierno del estado de Tamaulipas, por lo que se presentaron, hasta ahorita, 18 denuncias administrativas con 35 funcionarios, todos panistas de la administración de Francisco Javier García Cabeza de Vaca, por daños al erario superiores a 500 millones de pesos.
El gobernador Américo Villarreal denunció que también detectaron los delitos de peculado, coalición de servidores públicos y uso ilícito de atribuciones en el Sistema Estatal para el DIF, y en la Comisión Estatal de Agua Potable.
Detalló que en la Secretaría de Salud hay un faltante de 242 tabletas electrónicas, 94 computadoras portátiles, así como de equipos de impresión, cómputo y escaneo.
Seguramente los panistas en la CdMx argumentarán que se trata de una persecución política, cuando en realidad es descubrir el verdadero rostro de un panismo con poca vocación política pero una gran obsesión por el delito.
**Las columnas firmadas en este medio son responsabilidad de quienes las firman**
