El binomio perfecto, Claudia Sheinbaum y Ricardo Monreal
Por Carlos O. Silva Bandala
Realpolitik, en alemán: política realista. El término se utiliza, sobre todo como sinónimo de política de poder (power politics). En nuestro país, la realpolitik está basada principalmente en consideraciones de circunstancias y factores dados. En política, comúnmente se le denomina pragmatismo.
Binomio. Conjunto de dos personas o cosas tomadas como unidad o como elementos en equilibrio o dependientes uno del otro.
Coyuntura. Combinación de factores y circunstancias que caracteriza una situación en un momento determinado.
El Presidente AMLO, zorro de la política, no podría escapar de su consideración, en su hipersensibilidad, lo que está ocurriendo, una y otra vez en el Metro de la CdMx y cómo esos hechos están repercutiendo en la simpatía y/o aceptación preferencial, ciudadana, de Claudia Sheinbaum, jefa de Gobierno de la Ciudad de México para ser candidata presidencial y en su caso y a la postre, presidenta de México. Lo que le ha permitido al Presidente López Obrador mirar la realidad coyuntural con la mayor objetividad posible, dando a cada hecho o circunstancia, su justo valor.
El asunto del candidato/a presidencial de Morena, no solamente es ganar la presidencia de la República 2024-2030 y alcanzar al menos la mayoría simple en el Congreso de la Unión. Va más allá, por algo que olvidan los estrategas políticos del Presidente (si los hay), que es la continuación y transcendencia a partir del 2030 del partido Morena. Es decir, estratégicamente, cómo continuar a partir del sexenio 2030-2036.
Para propios y extraños, Claudia Sheinbaum es la predilecta en el ánimo del Presidente para sucederlo en el Ejecutivo Federal. El empate técnico en que se encuentran Marcelo Ebrard y la científica Sheinbaum en las preferencias ciudadanas no es producto de una destacada precampaña de Ebrard. Mucho de su acercamiento en las preferencias de la Jefa de Gobierno, es porque el Presidente le ha dado muchos vuelos. Ebrard ha estado en casi todas las “mañaneras” y lo menciona de manera reiterativa. La mejor campaña del Secretario de Relaciones y Exteriores, se la ha hecho el Presidente.
La diferencia objetiva, no supuesta, es que mientras Sheinbaum está en el ojo del huracán todos los días, pues los problemas en la CdMx son persistentes, y, está obligada a ofrecer y dar resultados satisfactorios, lo que no es fácil, Marcelo Ebrard nada de muertito, fifiando.
Frente a una elección el 4 de junio próximo, para el Gobierno del Estado de México, donde los momios de encuestas en preferencias para la Alianza Va por México (PRI/PAN/PRD) y Morena/PT/VE están reflejando de manera alternativa a favor o en contra, donde no hay una claridad de quien pudiera ser el triunfador/a al gobierno estatal, en la coyuntura de la problemática en la CdMx, ante la incertidumbre del triunfo de Morena en el Edomex es de entenderse que el Presidente se adelanta ante una derrota que pudiera darse y por eso le abre la puerta al Senador Ricardo Monreal, para incluirlo en los precandidatos de casa.
Por ahora no importa el piso parejo que el Senador pregona. Ya está adentro y que cada uno haga lo suyo a su muy estilo y conveniencia. El mencionado piso parejo lo están trasladando a los gobernadores morenistas, pues habrán de darle cabida a eventos para los cuatro. La segunda etapa será la encuesta de donde saldrá el candidato/a presidencial. Este piso parejo estará en veremos, todo el tiempo.
La coyuntura donde se entrelazan la elección en el Edomex y las problemáticas en la CdMx llevan para que Ricardo Monreal sea incluido en los precandidatos comentados, y encamina a las consideraciones siguientes: Si la Alianza Va por México con Alejandra del Moral al frente y triunfa, se le complica al Presidente/Morena para salir airoso en la elección para gobernador/a de la CdMx, toda vez que si Claudia Sheinbaum sigue bajando, se volverá cuesta arriba al Presidente, para amacharla en la candidatura presidencial. Me parece que el Presidente no la sacrificará, sea cual sea el resultado electoral en el Edomex. Pues es tanto como hacerse harakiri. Ya veremos si no.
Entonces, lo que pudiera ocurrir de ahora en adelante, es ver más a la gobernadora de la CdMx, acompañando al Presidente en las “mañaneras”, y a Marcelo Ebrard, cada vez menos. Para entender al Presidente, en la lógica de sus sentimientos, las señaladas indican que para subir a Sheinbaum y colocarla en la figura política más considerara a sucederlo, se necesita bajar del templete y que el Presidente mencione cada vez menos, a Ebrard.
Por el resto del año, las “mañaneras”, seguramente será el escenario para la gobernadora con el Presidente, atendiendo criticas y posibles soluciones de los aconteceres de la capital mexicana. Le apremia al Presidente /Morena rescatar la confianza de la mayoría de los capitalinos.
El Senador Monreal ha estado jugando a ganar ganar; ya lo logró, ya está en la cuarteta sentimental del Presidente. Le habían cerrado las puertas que inclusive, ni posibilidades se le daba para ser candidato a la jefatura de Gobierno de la CdMx; circunstancia que él mismo expresaba, en palabras más, palabras menos, que se ha preparado para ser Presidente de la República, más no para gobernador de la capital mexicana. El punto es, que el Senador va a la encuesta para candidato presidencial de Morena, sólo que la carga política del Presidente y de los gobernadores morenistas, 22, diga lo que se diga, estará en beneficio de la gobernadora Sheinbaum y para el Senador Monreal, lo previsible, bajo la mesa, es que sea el candidato al gobierno de la CdMx. Sin duda el político adecuado, morenista, más destacado, para triunfar y complementariamente ayudar al triunfo electoral de Claudia Sheinbaum. Binomio perfecto.
Esta es la coyuntura y las circunstancias para que Monreal sea parte de esos precandidatos presidenciales, en la vía hacia una candidatura más real, a la CdMx. Por lo que, en los tiempos electorales de Morena, de acuerdo a lo anterior, nos lleva a considerar que primero saldrá el candidato/a presidencial y acto seguido los 9 candidatos a los gobiernos estatales, incluido el de la CdMx.
Lo que queda en el tintero, es qué va a pasar a partir del 2024 con el partido Morena. Si como lo ha hecho público el Presidente AMLO, se va, a La Chingada, a escribir, y, no querrá saber nada de política, consecuentemente del partido, de suyo propio, que él mismo construyó, por el cual logra la Presidencia de la República. ¿Quién va a ser el líder que mantenga aglutinado, unido ese partido? Porque quien ocupe la silla presidencial, necesitará, aún más que ahora, de un partido fuerte, coligado, disciplinado, para contrarrestar los embates políticos, críticos a los que se enfrentará el próximo gobierno nacional. Si avanzamos en el tiempo, la ausencia del Presidente, puede ocasionar que le suceda a Morena lo que pasó con el PC, PS, PRD, unos desaparecieron y otro está en vías.
La gran fuerza política colateral de los presidentes priístas, fue haber contado con un partido (PRI) férreamente unido, controlado. Situación que le valió 70 años de gobiernos continuados. No vaya a ser que Morena dure un sexenio más, ese es el kit. El PRI sobrevivió, porque sus dirigentes fueron personalidades, zorros de la política, conocedores e institucionales probados. ¿Morena, logrará más de dos sexenios de gobernanza nacional? Sin el ciudadano Andrés Manuel López Obrador en la conducción y liderazgo, qué difícil y quién sabe.
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