Campaña presidencial: municipalista
Por Carlos O. Silva Bandala
Ya hemos hablado cuán difícil y complicado será que la alianza Va por México, ahora, llamada Unidad y Gobiernos de Coalición logre una candidatura de unidad, al haber una veintena de suspirantes a la Presidencia de la República, dado que en las ambiciones descontroladas por la decepción de quienes no lo consigan, de manera abierta o subterfugio se darán las traiciones. Es posible que logren una candidatura común, pero un “candidato de unidad”, difícil. Hay historias a las cuales nos hemos referido. Y la pregunta que queda es ¿Cuándo esto suceda, todos felices y contentos? En la mayoría de los políticos se ajusta muy bien la fábula del sapo y el escorpión.
Para el caso de la candidatura morenista, el Presidente ha dicho que los precandidatos son sus hermanos y pase lo que pase, se mantendrán unidos. De manera reiterativa las encuestadoras de opinión que sondean como van las mediciones de preferencias ciudadanas, es la gobernadora de la CdMx, Claudia Sheinbaum, quien lleva la delantera por diferencias de 8 y hasta 15 puntos sobre los otros tres.
Al soltarle las riendas a los 3 + 1, hemos podido constatar que pueden ser “hermanos del Presidente”, pero entre ellos, no hay tal. Marcelo Ebrard y Adán Augusto proclaman a los cuatro vientos que uno de ellos será el Presidente de la República. No se detienen en la encuesta por la que saldrá el candidato morenista. Se asumen merecedores de la candidatura y de la presidencia. Alardes fanfarrones al autocalificarse como la mejor opción para el pueblo de México.
¿Por qué se hace esta reflexión y de esa manera? Todo lleva a cavilar que Claudia Sheinbaum será la candidata de Morena. Entonces qué va a suceder con Ebrard y Adán Augusto, para mantenerlos unidos. ¿Se encaminarán al Senado? Y en su caso, pudiera ser por la vía plurinominal, misma que les garantiza seguir en el beneficio de las dietas, sin volver a arriesgar su acomodo.
ADÁN AGUSTO Y MARCELO EBRARD
La personalidad de Adán Augusto y de Marcelo Ebrard, son diametralmente diferentes. El carisma de ambos es muy distinto uno del otro.
Carisma. Es la capacidad de atraer, cautivar e influir en las personas que nos rodea. En esta parte son desemejantes.
Subjetividad. Se enfatiza en las emociones personales para expresar argumentos o realidades de las personas.
Ambos son, sin duda muy cercanos al Presidente. De Adán Augusto lo considera mi paisano, amigo y compañero de muchas luchas políticas. Ahora también, mi hermano. Habría que agregar: López de Marcelo Ebrard no empatan dos características muy poderosas en la emoción del Presidente (subjetividad): No es López y no es su paisano. Los dos son secretarios del gabinete presidencial. Ambos forman parte del estilo tradicional de los candidatos presidenciales priístas. El Presidente AMLO hace gala de aquella tradición que confirma la sentencia de la vieja guardia priísta: para ser Papa se necesita ser Cardenal (Secretaría de Estado). Fue en aquel entonces, la voluntad y fuerza de los presidentes del México priísta. Es también la fuerza de voluntad y poder del Presidente AMLO para colocarlos en la fila sucesoria al caso. Situación completamente diferente a la escalada de AMLO a la candidatura presidencial. AMLO era el líder de un movimiento político, lo es ahora mismo.
Por decenas de años la política electoral de cambio presidencial estuvo centralizada y se destacaba por candidaturas de personalidades de cúpulas partidistas y del Gobierno Federal. Por primera vez se hace realidad que un jefe del Gobierno de la CdMx se le incluya formalmente como precandidato presidencial. Sucedió en la época gloriosa del PRI que solo esa posibilidad se le atribuyese a los Secretarios de Estado del Presidente (Cardenales).
Si partimos del hecho de que las políticas públicas, son acciones del gobierno, que buscan dar respuestas a las diversas demandas de la sociedad, mediante un uso estratégico de recursos para aliviar los problemas nacionales, solo en las responsabilidades de la Gobernadora de la CdMx se hacen realidad esos compromisos con la ciudadanía en tiempo real, hoy por hoy, muy distinto a lo que son las responsabilidades de los otros tres precandidatos. Ese es el kit por el cual la diferencia preferencial en favor de Claudia Sheinbaum, y por supuesto, que, en su momento, será la gran diferencia con el que propongan los ahora llamados Unidad y Gobierno de Coalición. Quienes están anclados en el pasado de relumbrón (golpe de luz vivo y pasajero).
MUNICIPALISTA
Vivimos nuevos tiempos donde la vinculación del pueblo con sus candidatos al caso, pueden perderse en el discurso trillado de priorizar la construcción y participación ciudadana, con el objetivo de reconstruir el tejido social y dar pasos firmes a la estabilidad social y política, cuando en las circunstancias del pueblo de México hay demandas concurrentes en todas las regiones del país para atender y resolver problemáticas urbanas, en otras palabras, municipales. El 76.7 (Inegi) identifica los problemas en sus comunidades no resueltos para convivir con dignidad: baches, fallas y fugas de agua, alumbrado público insuficiente, delincuencia, robos, extorsiones, secuestros, fraudes, calles y avenidas con embotellamientos frecuentes, coladeras tapadas, servicio de transporte públicos deficientes, parques y jardines descuidados, deficiencia en red pública del drenaje, ineficiencia de servicio de limpia y recolección de basura, falta de tratamiento de aguas residuales, mercados y centros de abastos en mal estado, problemas de salud derivado de manejo inadecuado de rastros, en fin. En la retórica de los discursos de campaña estos asuntos y problemáticas ligados estrechamente a la gente, no pueden soslayarse, no deben pasarse por alto. Estas problemáticas sí se tocan, obligadamente; en lo demás, los discursos serán halagos, falsas promesas para convencer a los ciudadanos y convertirlos en instrumento de la propia ambición política de los candidatos. Demagogia rampante y vanidad.
2,469 municipios conforman los 31 estados y la CdMx. Los gobiernos municipales se caracterizan por la cercanía con la población, una interacción que le permite conocer sus necesidades y problemáticas. Su cercanía con la gente procura la defensa de los derechos humanos y el bienestar de la comunidad. Es la CdMx el municipio más poblado de la República y la zona conurbada con el Edomex que duplica su población para más de 24 millones de personas.
El éxito de AMLO para lograr la Presidencia de la República fue compenetrarse de las circunstancias de todos los municipios del país, a los cuales regresó por tres veces. La campaña presidencial para un candidato, de un partido político u otro, me parece debiera ser eminentemente municipalista, en lo demás serán discursos de oropel, que la gente ni entiende ni escucha. Quiérase reconocer o no, México necesita la confirmación de un presidente cada vez más cercano a la gente, por sobre todo, de los pobres.
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