Redefinición de la política industrial en México: Retos y oportunidades
México enfrenta desafíos y oportunidades únicos en el contexto del Nearshoring, una tendencia que busca acercar la producción a los centros de consumo.
Esta estrategia no implica simplemente trasladar fábricas desde Asia a México, sino expandir las capacidades en países con infraestructura existente y ventajas geográficas. La percepción pública es que México no ha aprovechado plenamente el Nearshoring, en parte debido a la falta de infraestructura adecuada. Sin embargo, esta necesidad de infraestructura puede ser vista como una oportunidad para la acción gubernamental y la inversión.
Según el Observatorio Nearshoring, México ha aprovechado efectivamente la relocalización en cadenas de suministro donde posee ventajas competitivas, como la industria automotriz y la producción de maquinaria. Además, se están desarrollando nuevos segmentos industriales, especialmente en la producción de vehículos eléctricos. Los principales flujos de inversión en México han provenido de empresas estadounidenses, europeas y asiáticas no chinas, principalmente.
Redefinición de la Política Industrial
Para capitalizar las oportunidades del Nearshoring, México debe redefinir su política industrial con un enfoque estratégico. Es esencial identificar y priorizar sectores industriales clave, inspirándose en modelos exitosos de países asiáticos. Estos sectores deben incluir manufactura avanzada y producción de componentes, no solo productos terminados.