Ministro francés propone renegociar reforma de las pensiones impuesta por Macron
El primer ministro francés, el centrista François Bayrou, propuso este martes renegociar la impopular reforma de las pensiones del presidente Emmanuel Macron, en una mano tendida a la oposición de izquierda para evitar una rápida caída de su gobierno.
El anuncio rompe una línea roja del oficialismo que hasta ahora rechazaba reabrir esta reforma clave, que Macron impuso en 2023 por decreto pese a las protestas masivas, la oposición de los principales sindicatos y sin votación en el Parlamento.
Pero la profunda crisis política desde las elecciones legislativas anticipadas de 2024 y la situación económica, con unos niveles de déficit y deuda públicos por encima de los límites de la zona euro, motivaron a Bayrou a dar el paso para «recuperar la estabilidad».
«Podemos buscar una nueva vía de reforma, sin tótems ni tabúes, ni siquiera la edad de jubilación –los famosos 64 años– a condición» de no socavar el «equilibrio financiero», anunció Bayrou, de 73 años, en su Declaración de Política General ante el Parlamento.
Al frente de un gobierno sin mayoría que reúne a la alianza centroderechista de Macron y al partido conservador Los Republicanos (LR), el objetivo del primer ministro es convencer a los socialistas para que no apoyen una moción de censura y garantizarse su supervivencia.
Los socialistas, que concurrieron a las legislativas en el seno de la coalición Nuevo Frente Popular (NFP) con otros partidos de izquierda, hicieron campaña por la derogación de la reforma de las pensiones y habían reclamado a Bayrou al menos su suspensión temporal.
El primer ministro lo rechazó, pero aceptó renegociarla «con los interlocutores sociales» a partir del viernes y durante tres meses para buscar una alternativa al retraso de la edad de jubilación de 62 a 64 años que respete el «equilibrio financiero».
Pero el aliado histórico de Macron advirtió: Si no se logra «un acuerdo que sea equilibrado y más justo», «la reforma actual seguirá aplicándose».
«Las cuentas no salen», respondió el vocero socialista en la Asamblea Nacional (cámara baja), Boris Vallaud, quien celebró las discusiones pero rechazó que se vuelva «a la ley anterior» si no se logra un acuerdo.